La formación del profesorado tendría que abarcar ámbitos formativos dirigidos no sólo a ofrecerles conocimiento técnico de los programas y recursos de comunicación de redes digitales, sino y sobre todo conocimiento pedagógico, cultural y experiencial de lo que representa incorporar estas tecnologías a la práctica de enseñanza tanto del aula como el centro escolar.En definitiva, el reto no es solo cualificar al profesorado para que sea un usuario de la tecnología en la clase, sino para que sea un profesional que sabe enfrentarse a la complejidad de los problemas culturales del alumnado que están surgiendo en un contexto social en el que las nuevas tecnologías están omnipresentes y que tiene la capacidad para planificar y poner en práctica soluciones educativas tanto en su aula como en su centro.
Para que haya una verdadera integración curricular de las TIC, debe existir necesariamente, además de cierta competencia tecnológica, una formación pedagógico-didáctica del profesorado. Os dejo aquí unas pinceladas sobre la integración curricular de las TIC y su necesaria correlación con la formación docente
viernes, 23 de octubre de 2009
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